domingo, 7 de julio de 2013

De las coincidencias inquietantes

"Como no he tenido hijos, lo más importante que me ha sucedido en la vida son mis muertos, y con ello me refiero a la muerte de mis seres queridos. ¿Te parece lúgubre, quizá incluso morboso?Yo no lo veo así, antes al contrario: me resulta algo tan lógico, tan natural, tan cierto. Sólo en los nacimientos y en las muertes se sale uno del tiempo; la Tierra detiene su rotación y las trivialidades en las que malgastamos las horas caen sobre el suelo como polvo de purpurina. Cuando un niño nace o una persona muere, el presente se parte por la mitad y te deja atisbar por un instante la grieta de lo verdadero: monumental, ardiente, impasible. Nunca se siente uno tan auténtico como bordeando esas fronteras biológicas: tienes una clara conciencia de estar viviendo algo muy grande"
 
Cae por casualidad en sus manos "La ridícula idea de no volver a verte" de Rosa Montero y piensa, bueno, otro libro más para  leer este verano. Ahora anda enfrascada en algo de un autor murciano que no va dejar a medias por muy flojo que le este resultando, además ella nunca pasa a otro libro sin acabar el anterior.
Pero la curiosidad le puede y lo abre; el primer capítulo se titula "el arte de fingir dolor" y lee ese principio que la atrapa en apenas cinco segundos. Ya está perdida, tenía que ser en este momento, en estos días, que le prestaran ese libro y que ella empujada por no se sabe qué fuerza empezara a leerlo, que esas páginas la estuvieran esperando... una de las muchas coincidencias raras, imposibles, inquietantes y abundantes  en las que la propia autora dice creer y yo, pues también.
 

1 comentario:

Menos de la mitad de mi vida dijo...

El mañana, el mañana y el mañana
se desliza con pasos sigilosos un día y otro día,
hasta la sílaba final, escrita
sobre las páginas del tiempo.

Y todos nuestros ayeres han iluminado a los locos
la senda que conduce al polvo de la muerte.
Oh breve luz,apágate, apágate.
La vida es tan sólo una sombra pasajera,
un pobre comediante que se agita
haciendo su papel sobre la escena
y no vuelve a salir mas.
Es una historia contada por un loco,toda llena de estrépito y violencia,
mas sin ningún sentido.

Macbeth